Ahora que se acerca la Semana Santa y muchos os vais de viaje quiero escribir este post. Incluso cuando estás de viaje, puedes seguir manteniendo una buena rutina de cuidado oral.
Muchas personas además de un cepillo de viaje tienen pasta de dientes en formato mini y pequeños contenedores de seda dental en su bolso, bolsillo del abrigo, en su neceser de oficina. Es muy inteligente si llevaras uno de forma habitual en tu bolso. Es aconsejable tener un kit de baño preparado con estos utensilio para que está listo para cogerlo en caso de que te vayas rápido.
Recuerda que lo más importante es cepillarte los dientes, incluso si no tienes pasta. Eso es mucho mejor que nada. La acción mecánica de barrido ayuda mucho, aunque no haya acción química.
Algún que otro truquito para cuidarse la boca durante un viaje puede ser:
- Chicles: si no tienes a tu disposición cepillo y agua, procura tener a mano un paquete de chicles sin azúcar. El efecto del chicle radica por un lado en la estimulación de la producción de saliva, lo que ayudará a que las bacterias tengan un pH menos favorecedor para la caries. Incluso hace cierto efecto de remoción de restos de alimentos de las caras oclusales de las muelas.
- Picotea bien: Si no tienes a mano la oportunidad de alimentarte bien y sólo puedes acudir a una maquina de vending tu boca agradecerá que tomes frutos secos antes que golosinas o caramelos. En concreto si tomas cacahuetes ayudarás a proteger el esmalte de la placa dental ya que es capaz de neutralizar los ácidos y además aporta fósforo (un mineral muy saludable para el diente). Si tomas panecillos o snacks se quedarán restos de el entre los dientes y sin cepillo o seda dental para removerlo… puede comenzar a hacer caries.