Si bien es cierto, los niños parece que tienen un Ángel de la Guarda, porque a lo largo del día (sobre todo cuando son muy pequeños), están a punto de la caída, del golpetazo, del tortazo… en bastantes ocasiones. Pero hay algún momento en el que su Ángel se toma un descanso y el peque…. Plash!!! Se da un golpe.
¿Os habéis planteado qué hacer si a tu hijo se le cae un diente de un golpe? ¿Cuánto se puede esperar a reconstruir un diente roto? Y si se le mueve el diente ¿se puede hacer algo? ¿Es normal que se oscurezca el diente?
Bueno, pues en este post daré respuesta a la primera pregunta. Haré una serie de post para ayudaros a reaccionar ante un traumatismo dental. Pero hoy nos vamos a central en la avulsión dental o dicho de otro modo, cuando el diente se sale por completo de su lugar.
Aunque la implicación no es la misma si ocurre en un diente de leche o en uno definitivo, voy a daros unas pautas sobre como actuar (común a las dos situaciones)
Quiero transmitiros un mensaje positivo: una avulsión dental tiene solución si sabemos reaccionar a tiempo, con agilidad y tenemos unos conocimientos básicos. Hay que procurar calmar al peque, pero lo importante es localizar el diente y tratarlo de forma adecuada. Para ello:
- NO lavaremos el diente, ni los rasparemos y tampoco lo limpiaremos con ninguna solución desinfectante.
- Buscaremos un dentista que nos atienda de urgencia
- NO transportaremos el diente en seco
- Es muy importante que pongamos el diente en un medio acuoso adecuado. Para ello la marca 3M desarrolló un producto llamado “save a tooth” que contiene la solución balanceada de Hank. Si no se dispone de ella, un buen medio es la leche fría y si tampoco se tiene acceso, se debe poner dentro de la boca, con la propia saliva (de alguno de los padres, ya que es frecuente que el niño no atienda a nuestras instrucciones).
La supervivencia del diente depende de dos aspectos:
- del tiempo que se tarda en reimplantar
- del tipo de medio en el que se ha conservado
Si se reimplanta en menos de 5 minutos, la tasa de supervivencia alcanza el 97%. Si se mantiene en la solución de Hank o en leche fría, los fibroblastos (células de la raíz que hacen que se forme el ligamento periodontal y se vuelva a unir al hueso) aguantan hasta 4 horas. Si se lleva en la saliva tan solo se dispone de 45 minutos para poder reimplantarlo.
Si tenemos capacidad de lavar el diente con una de las soluciones adecuadas y habilidad, podremos reimplantar el diente. Para ello previamente se ha debido lavar el alveolo (hueco que deja el diente) con suero salino hasta asegurarnos que no quedan restos de arena, ni de nada. Reimplantaremos el diente colocándolo en su posición con una presión suave y controlada hasta que el diente llegue al fondo del alveolo.
Se le pedirá al niño que muerda suavemente una gasa o un pañuelo y se acudirá de urgencia al dentista para que haga la evaluación oportuna. Os dará instrucciones de cómo proceder según el diagnóstico que efectúe.
¿Qué va a hacer el dentista? Os lo explicaré en el siguiente post. Si tienes dudas solicita una primera consulta gratuita con nosotros en zendental.es o llamando al 91 640 15 75