Los odontólogos siempre insisten en practicar una correcta higiene oral desde la infancia, y es que esta es la verdadera base para que a largo plazo una persona pueda gozar de una excelente salud bucodental, pues con el paso del tiempo el cuerpo va cambiando a nivel de células y tejidos que muchas veces pueden generar afecciones que deben ser tratadas oportunamente, y esto no excluye la boca.
Desde tratamientos sencillos hasta implantes dentales, los especialistas atienden las condiciones o enfermedades bucales que se producen por malos hábitos, pero también por signos propios de la edad.
Problemas por envejecimiento
El consumo de azúcares, mala alimentación, escasa limpieza bucal y uso de medicamentos son algunos de los hábitos que favorecen el desgaste y deficiencia de la dentadura. Mientras estas prácticas se extiendan desde la niñez hasta la etapa adulta, más problemas bucales se presentan; además, los cambios orgánicos y fisiológicos relacionados con el envejecimiento influyen en la cavidad bucal.
En este contexto te presentamos cuatro afecciones comunes que se presentan al pasar los años:
- Problemas de encías: En los adultos, conforme va pasando el tiempo, se va perdiendo tejido de la encía, cambia su color y textura, generando una separación con el diente que hace más fácil la acumulación de bacterias y formación de sarro. Cuando esto no es solventado adecuadamente, se puede desencadenar gingivitis o periodontitis.
- Resequedad: Algunas personas adultas, especialmente mayores que toman medicamentos, presentan resequedad bucal por poca producción de saliva, siendo esta la que protege a los dientes de las caries y ayuda a tener encías saludables. En este sentido, al no tener suficiente saliva, se genera dificultad para masticar o tragar, así como también infecciones.
- Caries: Es muy frecuente que si a lo largo de la vida no se tiene un adecuado aseo bucal, la concentración de bacterias hace que los dientes se vayan concentrando y se produzcan orificios o deformación en la dentadura. En este contexto vale destacar que las caries producen halitosis (mal aliento), algo que afecta fuertemente el autoestima y las relaciones sociales.
- Desgaste o pérdida de dientes: En el área odontológica esto se conoce como atrición, que es el desgaste de la estructura dental, generalmente relacionada con la edad o con bruxismo (rechinamiento constante de los dientes). Existen dos tipos: la fisiológica y la patológica
En este ámbito, un estudio de la Universidad de Costa Rica señala que el envejecimiento bucodental es lento y no tan notable hasta que se empiezan a caer o atrofiar los dientes, encías y labios dando un aspecto no saludable, además del cambio de coloración, pues tienden a ser amarillentos. También los procesos restaurativos que no tienen un control y seguimiento, como implantes, resinas, entre otros, dañan la composición de los dientes a largo plazo.
Cuidados que mantendrán tu boca saludable
- Correcto cepillado de dientes y lengua, con frecuencia diaria.
- Uso de hilo dental para evitar acumulación de bacterias.
- Alimentación sana.
- Acudir periódicamente al odontólogo.
- En caso de tener prótesis, lavar y cepillar con los implementos adecuados.
De esta forma se puede tener una cavidad bucal sana a pesar de la edad, ya que la prevención es la mejor estrategia para tener una buena sonrisa, sin embargo al presentarse alguno de los problemas mencionados, lo importante es la atención oportuna con un especialista.
A pesar de que estas afecciones son comunes en la población adulta, también pasa en niños y jóvenes por la falta de higiene, así que lo primordial es conocer cómo asear los dientes y toda la cavidad bucal para tener como hábito diario y tener asesoría de profesionales de la odontología de ser necesario.
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