La rehabilitación oral con implantes dentales es uno de los métodos más duraderos que hay hoy en día. Basamos la durabilidad del tratamiento en unos pilares fundamentales:

PRIMERO.- En un buen diagnóstico para la indicación del implante.

SEGUNDO.- Emplear buen material.

TERCERO.- Seguir protocolos estrictos y adecuados.

Para cumplir con estos fundamentos en Zen dental ofrecemos a nuestros pacientes:

• Un buen diagnóstico, que se realiza con:

1º. Profesional con una formación adecuada, no sólo en implantología, sino que integre el resto de las especialidades.

2º. Contar con medios diagnósticos buenos.

• Trabajamos con material que tiene aval científico, calidad demostrada y cumple los objetivos que requiere el paciente en concreto. Nosotros trabajamos con tres marcas diferentes de implantes, según el caso concreto.

• Estudiamos el caso y seguimos el plan de tratamiento establecido. Nos guiamos con protocolos verificables y comprobados. Nuestro gabinete de cirugía cumple con el protocolo quirúrgico: esterilidad absoluta durante todo el tratamiento.

El tratamiento con implantes dentales consta de dos fases:

• 1ª Fase: En la que se coloca el implante en una cirugía indolora. Este proceso suele durar alrededor de 1 hora para la colocación un implante y no más de 2 ó 3 para la colocación de más. Seguimos un protocolo por el cual:
  • Evaluamos y planificamos.
  • Premedicamos al paciente con antibiótico, analgésicos antiinflamatorios y un sedante (por ello recomendamos que no conduzca tras la intervención).
  • Anestesiamos la zona a intervenir de forma local (como para cualquier tratamiento odontológico).
  • Preparamos el lecho para el implante, en un gabinete de uso exclusivo quirúrgico y con las más estrictas medidas de esterilidad.
  • Colocamos el implante dental y cerramos la mucosa.
  • Dejamos al paciente en una sala de recuperación un tiempo para que se recupere y se le facilitan las instrucciones postoperatorias.
  • Hacemos una radiografía de control postquirúrgica.

• 2ª Fase: Tras esperar alrededor de 3 meses en el maxilar inferior y de 6 en el superior, se realiza una radiografía de control para asegurarse de la buena integración del implante en el hueso. En el plazo de 3-4 semanas se termina con la realización de la corona o de la prótesis.

Elevación de seno: Es una técnica para solucionar el principal problema para la colocación de implantes en la zona posterior del maxilar superior: la escasez de hueso que suele haber.

Injertos óseos: Es el procedimiento por el cual podemos colocar tejido óseo que ayude a regenerar y a ganar volumen en el hueso, cuando hay poco hueso o encontramos un gran alvéolo que ha dejado una raíz.

Expansión ósea: Consiste en ir expandiendo progresivamente la cresta del hueso en los casos en los que está colapsada (estrecha). Se puede hacer gracias a la elasticidad que tiene la estructura ósea, siempre y cuando se parta de grosores mínimos de 3mm.

Carga inmediata: Hoy en día, con las nuevas superficies de implantes y otros avances tecnológicos, en algunas ocasiones es posible colocar el implante y la corona a la vez, con lo que se reduce al máximo los tiempos de espera hasta tener “dientes”.

Implantes inmediatos: Se considera un implante inmediato al que se coloca el mismo día que se realiza la extracción de la raíz dentaria.

Cirugía mínimamente invasiva: El uso de sistemas informáticos junto con un escáner en 3D, permite la planificación virtual de la colocación de implantes tridimensionalmente.

Se suele emplear para la planificación de implantes en pacientes con cierto grado de complicación.