¿Sabías que gran parte de las enfermedades y problemas dentales y bucales pueden prevenirse desde pequeños? No solo hablamos del herpes bucal, también de otros malestares derivados por no masticar bien.
Cuando conozcas las dificultades que surgen por la mala masticación de los niños, sabrás la respuesta a una pregunta que seguro te haces: ¿Debería poner ortodoncia a mi hijo?
Las enfermedades orales se desarrollan por estrés y por no masticar adecuadamente
Cuando un niño no mastica correctamente, los alimentos no son triturados lo suficiente para facilitar el trabajo del sistema digestivo. Este mal hábito puede continuar hasta la edad adulta.
El estrés también se suma a la mala técnica para mascar, lo cuál provoca dificultades en la salud bucal. Una persona que no tritura correctamente los alimentos, tiende a incrementar los niveles de estrés en su organismo.
Hay muchos niños que se estresan por la escuela, por los conflictos familiares o por el bullying al que los someten. A continuación mencionamos algunos de estos problemas dentales.
Problemas en las mandíbulas
Si el niño vive con altos niveles de estrés y no tritura la comida adecuadamente, sentirá dolor en los costados de la mandíbula. Causará que las articulaciones no encajen de forma correcta o que los músculos estén tensos.
Una forma de comprobar si existe este problema es cuando el niño mastica carne u otros alimentos que requiere mayor tiempo para triturarlos. Si el niño se cansa inmediatamente, es una señal que debes atender.
Un tratamiento que suele recomendarse es la colocación de un implante de resina estética, se les conoce como pistas de composite, las cuales orientan la mandíbula para que cierre perfectamente.
Heridas internas y posibles infecciones
Si un joven o niño está estresado, comerá a prisas sin moler bien y posiblemente lastimará el interior de su boca. Algunas de estas heridas cerrarán en pocos días, pero si el infante con frecuencia roza esa zona con sus dientes, corre el riesgo de que se convierta en una llaga ulcerosa poco profunda. Al orientar los dientes, evitarás las mordidas internas. Un tratamiento de ortodoncia interceptiva será eficiente para lograrlo.
Dientes astillados
Las personas que tienen el hábito de rechinar los dientes por causa del estrés o por no cerrar bien la dentadura, pueden debilitar la superficie de sus piezas dentales.
Al hacerlo se exponen más a las fracturas y creación de astillas. Esta situación se puede tratar con la colocación de una férula de silicona en los dientes cuando el niño duerme, lo cuál reducirá la fricción en sus dientes.
Consejos para evitar problemas bucales
La odontopediatría ha descubierto métodos para ayudar a corregir los dilemas al masticar. Una visita con tu dentista de confianza te será de utilidad para evaluar el tratamiento adecuado. Sin embargo, desde casa puedes hacer mucho para ayudar al pequeño a que coma correctamente.
Aleja las distracciones a la hora de comer
No permitas que el niño vea televisión o dispositivos móviles mientras come. Vigila que no tenga distracciones que lo obliguen a comer rápido.
Comer con la boca cerrada
Si el pequeño cierra adecuadamente la mandíbula, será más fácil detectar si hay problemas en los músculos o articulaciones.
El buen hábito de masticar adecuadamente posterior a la lactancia
El niño podrá masticar incluso con dientes de leche después de dejar la lactancia materna. Puedes partirle sus alimentos en trozos pequeños que le faciliten el proceso.
Si tu hijo apenas ha superado los 12 meses, puedes cocer sus alimentos un poco más de lo normal para que queden más blandos.
Con un correcto tratamiento de ortodoncia infantil podrás corregir las patologías bucales y ayudarás a que tu niño pueda masticar correctamente. Acude con expertos en el ramo y podrás ayudar a que tu hijo lleve una vida plena ahora y en el futuro.