Durante la infancia es cuando la maloclusión se puede corregir con mayor facilidad a través de la ortodoncia infantil. Acudir al ortodoncista a tiempo puede salvar a tus hijos de tener que recurrir a tratamientos más costosos, complicados y hasta dolorosos en la juventud y la adultez temprana. Así que, si creías que tus hijos son muy jóvenes para ir con el odontólogo, piénsalo de nuevo y entra en acción.
¿Cuándo llevar a los niños al ortodoncista?
Hoy en día, la recomendación es llevar a los niños al odontopediatra cuando los primeros dientes comienzan a asentarse. Así, se previene el avance de la maloclusión, problemas de crecimiento y se corrigen caries de biberón, que pudieran evolucionar y convertirse en un tema de salud bucodental más grave.
A continuación, algunos consejos sobre estas etapas:
- Entre los seis meses y un año es aconsejable llevar a los niños a visitar al odontopediatra por primera vez. Así, el niño se comienza a familiarizar con esta práctica y los padres reciben orientación sobre el cuidado de su dentición. El especialista también atenderá caries u otros problemas que el niño pudiese tener.
- Durante el pico de crecimiento es un excelente momento para llevar a tus niños al odontopediatra e iniciar tratamientos.
- Si observas en tus infantes hábitos como succionar sus dedos, o formas no convencionales de deglución, deberías visitar al odontopediatra. Estas prácticas causan daños en la estructura ósea facial y afectan la posición de los dientes. De todas formas, el ortodoncista infantil te ayudará siempre que acudas a él a tiempo.
- Salvo que el especialista indique lo contrario, cuando un niño muestra algún signo de mala oclusión, sus tratamientos con ortodoncia Las Rozas solo iniciarán cuando todos los dientes temporales (de leche) hayan aparecido. Eso usualmente ocurre alrededor de los tres años.
- Según variables, como la gravedad del problema, el progreso que el tratamiento genere y otros, el ortodoncista infantil te pedirá agendar citas mensuales.
¿Por qué es importante acudir a consulta mensualmente?
Como muchas otras cosas en la vida, la disciplina es clave para que el tratamiento sea eficaz. Además de las rutinas de aseo y cuidado que los niños y sus padres deben mantener, es importante que acudan al ortodoncista de manera mensual o con la frecuencia que el profesional indique. Conoce las ventajas de esta periodicidad.
- Generar en los dientes y huesos faciales un grado de movimiento específico. Es la función primordial de cualquier aparato. Cada mes, el profesional evalúa tu progreso y hace los ajustes necesarios para lograr el resultado deseado. Si te saltas la consulta durante dos meses, los dientes y aparatos seguirán sus actividades sin dirección, pudiendo estancar o incluso revertir los logros alcanzados.
- Prevenir o atacar la aparición de enfermedades bucales. Llevar ortodoncia no es una vacuna contra enfermedades bucales como las caries, manchas, periodontitis o reabsorción de la raíz del diente. Por el contrario, puesto que la limpieza dental se hace un tanto más compleja, generan vulnerabilidad en la salud bucal.
- Garantizar la eficiencia del tratamiento. En algunos países la ortodoncia es más costosa que en otros. Pero, en cualquier caso, es una inversión significativa.
Con los cuidados y atenciones correctas, llevar ortodoncia puede ser un proceso llevadero para tus niños. Luego de vivir esa experiencia, te darás cuenta de que habrá valido la pena toda la inversión, no solamente en cuanto al dinero, sino también en el tiempo que lo ha llevado puesto. Recuerda: puedes hacer que la sonrisa de tus niños sean perfectas. Solamente necesitas confiar en la ortodoncia.
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