Al culminar el tratamiento de ortodoncia, esto es cuando retiran los brackets, lo normal es que la persona quede con un tratamiento de retención, con retenedores dentales. Para esta etapa se deben usar retenedores al principio de forma continua y luego sólo para dormir.
¿Qué son los retenedores?
Los retenedores dentales son unos aparatos, elaborados a medida, que coloca el especialista en ortodoncia al final del tratamiento. Este elemento impide que los dientes retornen a la posición que tenían antes del inicio del tratamiento. La dentadura tiene una tendencia natural a moverse, por lo que si no se toma alguna medida volverá a recuperar su espacio en la encía. Este freno para el movimiento de los dientes se puede encontrar de tipos: fijos y removibles.
- Fijos: Son recomendados para cuando la retención es de canino a canino. Se coloca directamente sobre la cara lingual de incisivos y caninos inferiores. Es un modelo que lo retira y lo vuelva a colocar el especialista, pero que dura muchos años. Se coloca en los dientes inferiores.
- Removibles: Estos son aparatos que se retiran para limpiarlos y se vuelven a colocar, con el cuidado y uso correcto pueden durar mucho tiempo. Se pueden colocar tanto en los dientes inferiores como en los superiores. Se elaboran utilizando un molde de la dentadura tal y como queda luego de la ortodoncia.
En los primeros tres o cuatro meses de haber retirado los brackets, el retenedor se debe utilizar todo el día, incluso para dormir. Luego de este periodo de tiempo se utilizará solamente para dormir y por tiempo indefinido. Ellos tienen el objetivo de preservar la posición lograda por los dientes con el tratamiento de ortodoncia.
Recomendaciones para que los retenedores duren por más tiempo
El retenedor es un aparato que se elabora a medida del usuario, por lo que lo más rentable para la persona es que dure el mayor tiempo posible antes de tener que mandar a hacer otro. Para prolongar este tiempo puedes seguir las siguientes recomendaciones, que no son más que un conjunto de buenas prácticas para el usuario del retenedor.
Debes ser muy cuidadoso al quitarte el aparato. El retenedor removible suele ser resistente, pero por su pequeño tamaño son susceptibles a dañarse accidentalmente. También procura alternar el lado por el que lo sacas para evitar un desgaste excesivo por uno de los lados.
El aseo de los retenedores debe ser cuidadoso. Si es fijo la limpieza se realiza con el cepillado regular. En el caso de los removibles debes lavarlos cada vez que lo retires, se recomienda usar un jabón neutro. Debes tener en cuenta que la pasta de dientes hace que el retenedor removible pierda transparencia.
Guarda el retenedor en su estuche. Cuando no tengas el retenedor puesto no lo coloques en servilletas o cosas similares, es así como ocurren los accidentes y corres el riesgo de dañarlos o perderlos.
Se debe tener cuidado al morder. Si tienes retenedor fijo y muerdes tirando del alimento dañarás el retenedor. Se debe tener el mismo cuidado que con los brackets. Si usas retenedor removible simplemente te lo debes quitar para comer, este modelo se daña con los alimentos.
Evita morder tus uñas. Esto hará un esfuerzo excesivo sobre el retenedor y precipitará el desplazamiento de los dientes.
Acude a las revisiones regulares. Es importante que un especialista verifique que todo va bien, en lugares como ortodoncia Las Rozas te brindan asesoría y revisan el buen estado del retenedor y la dentadura.
Con los cuidados adecuados, y siguiendo estas recomendaciones disfrutarás de una hermosa sonrisa. El tratamiento de ortodoncia perdurará en el tiempo y el cambio de retenedor será solamente el recomendado por los expertos.
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