Si no se te ocurre pensar que el pescadero te corte el pelo, ¿por qué somos capaces de recibir tratamientos médicos de manos de personas que no lo son? Me refiero por ejemplo a las depilaciones láser, a mesoterapias y a blanqueamientos dentales. El verdadero problema no es la posible falta de resultado, sino el daño que se puede producir.

Como lo que a mi me atañe son los tratamientos dentales, me voy a centrar en los blanqueamientos. Recientemente salió la Directiva 2011/84/UE : Implicaciones en la regulación de los tratamientos blanqueadores.

Los tratamientos tendrán que ir precedidos de un correcto diagnóstico, una indicación y la aplicación del producto por parte del odontólogo, al menos en su primera aplicación o bajo su supervisión directa. La nueva norma aclara que concentraciones por encima del 0,1% han de ser administradas por el odontólogo, quedando como productos de libre disposición aquéllos con menor concentración, los cuales tienen una acción muy limitada y por tanto no se percibirán los resultados.

Por lo tanto, si te haces un blanqueamiento en un tenderete de centro comercial o en un establecimiento que no tiene licencia de actividad odontológica, sin dirección médica-odontológica, no tiene medios para hacer una buena exploración bucal y por lo tanto un diagnóstico oral completo… no pueden (deben) realizar tratamientos blanqueadores como los que realizamos en las clínicas dentales. Así que o  incumplen la ley y exponen a sus clientes (porque no les consideran pacientes) o les engañan y usan productos que no son efectivos.

He de añadir que no sólo es necesario un correcto diagnóstico, sino que también es importante hacer una limpieza profesional para asegurarse de eliminar todas las tinciones superficiales que pueda haber en la dentadura.

Si tienes cualquier duda nosotros te la solucionamos. Pide una consulta gratuita en Zen dental llamando al 916401575 o en www.zendental.es